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¿No “prioritarios”?

Clara Scherer

Clara Scherer

En México, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), se han registrado dos mil 314 feminicidios de enero de 2015 a septiembre de 2018. Lugar 60, de 80 países donde los derechos de las mujeres no se respetan.

Los asesinatos de mujeres son la forma más extrema de violencia y crueldad, entre las muchas formas de control naturalizadas del cuerpo, las libertades y la vida de las mujeres, y en este marco, ¿se anotan las leyes que las criminalizan por abortar?

Aunque sus promotores se digan “a favor de la vida desde la concepción y hasta la muerte natural”, escandalosa hipocresía, sólo las persiguen. Evidente que cuando a alguno de estos “defensores” les da catarro, corren al médico para no dar lugar a “la muerte natural”.

¿Por qué anotarla como causal de feminicidio? Según datos de la Secretaría de Salud, el aborto (20%) y la hemorragia obstétrica (20%) son la segunda y cuarta causas de muerte materna. 

Las más pobres, trabajadoras y estudiantes son quienes tienen más riesgo de morir por abortos inseguros. Teresa Incháustegui: “antes de 2007, seis de cada diez mujeres morían por complicaciones en su realización, y con la despenalización del aborto en la ciudad, se logró una tasa del 0% de mortalidad por aborto”.

Salvar la vida de mujeres es posible con garantizar derechos. La obligación del Estado es protegerlos, no encarcelarlas o silenciarlas.

En 10 de los estados que las criminalizan se han declarado alertas de género y, en cinco más con dicha legislación, la situación es terrorífica. Enero de 2019: Baja California, 27 mujeres asesinadas y Guanajuato, 21, aunque la alerta no se ha declarado. Si el Estado, vía los congresos locales desprecia la vida de las mujeres, la ciudadanía (masculina) no hace más que ejecutar el mandato.

María Salguero afirma que “en las zonas centrales de México con fuerte presencia del huachicoleo, las mujeres se han convertido en objetivo de la “guerra de exterminio” que libran las bandas criminales que se disputan el control del robo de combustible”. Esos estados, cristeros en otro tiempo, han decretado la ley “provida”. Allá, “las mujeres son vistas como botín de guerra, las usan como trofeo, se trata de una guerra de exterminio hacia el enemigo, pero también hacia las familias”. (https://queretaro.quadratin.com.mx/aumentan-feminicidios-en-zona-huachic...)

El primer mes del año comenzó con datos alarmantes: 123 feminicidios según Frida Guerrera, ocho de niñas. El SESNSP informa: asesinadas 304 mujeres, en promedio 10 al día, de estos casos, sólo 75 son investigados como presuntos feminicidios, 24.67 por ciento.

Una chica argentina declaró: “La lucha contra los femicidios nos llevó a luchar contra todo tipo de violencia hacia la mujer. No poder decidir sobre nuestros cuerpos es una forma de violencia”. Oriana López: “Hay muchas formas en que las mujeres podrían tener abortos seguros. Con información, acceso a internet y un poco de dinero, pueden tener acceso a cómo se utilizan de forma adecuada medicamentos que están al alcance de todas las personas en las farmacias”.

La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, de la que México es parte, incluye al aborto como derecho sexual porque consideran que “La capacidad de las mujeres para tomar decisiones libres para ellas mismas y sus familias no debe ser un privilegio reservado a las mujeres ricas, sino que debe ser el derecho de cada mujer y niña en todo el mundo”. 

Urge garantizar una educación sexual basada en principios científicos para que las mujeres decidan libremente sobre su sexualidad y su cuerpo; distribución oportuna y suficiente de métodos anticonceptivos de calidad y gratuitos para no abortar, y aborto libre, seguro y gratuito para no morir.

Somos más del 50% del pueblo y por ese hecho, nuestros derechos, a la vida y a decidir, sí son prioridad.

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